Sobre los caballeros templarios


La Orden de los Caballeros Templarios (Ordo Militiae Christi) fue fundada en 1118/19 por caballeros nobles franceses en Jerusalén para proteger a los peregrinos y Tierra Santa. II. El Rey Balduino de Jerusalén le dio a la Orden unas dependencias situadas junto a las ruinas del Templo de Salomón, de ahí el nombre de “Templarios” para los caballeros que combinaron el ideal de vida del caballero cristiano monástico y guerrero.

La Orden fue disuelta por el Papa Clemente V en 1312 sobre la base de una serie de acusaciones falsas lanzadas por monarca francés Felipe el Hermoso, siendo disuelta la Orden pero reintegrados a la comunión con Cristo los Caballeros Templarios falsamente acusados, tras constatar el Papa que tales acusaciones eran falsas . Por lo tanto, las diversas organizaciones que se formaron en los siglos siguientes, llamándose a sí mismos “Caballeros Templarios” y aquellas que se declaran como sucesoras legales de la antigua orden, son todas ilegítimas, ya que nunca han recibido la aprobación de la iglesia absolutamente necesaria para su operación.


En 1979, en Italia, el conde Marcello Alberto Cristofani della Magione, siguiendo el espíritu de la obra de San Bernardo de Claraval “De laude novae militiae”, fundó una nueva orden de monjes llamada Orden de los Caballeros Templarios (Milicia Templi – Christi pauperum Militum Ordo), sin reclamar la sucesión legal, basada en las reglas del orden. Esta orden fue aprobada por el estado ese mismo año y por la iglesia en 1988. En 1989, II. El Papa Juan Pablo concedió una serie de indulgencias plenarias a las diversas celebraciones de la vida de los Caballeros Templarios. El reconocimiento eclesiástico de la Orden de los Caballeros se demuestra por el hecho de que la publicación eclesiástica oficial “Dizionario degli Istitut di Perfezione” (Edizione Paoline, Roma 1997) describe esta orden de caballeros como la única Orden legítima de los Caballeros Templarios en el capítulo “Restauración de los templarios”.

En enero de 2019, se incluyó a la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo – Militia Templi bajo la dependencia de la Congragación para la Doctrina de la Fe, órgano de la Santa Sede encargado de la vigilancia, promoción y tutela de los institutos y congregaciones dependientes de la misma.

Por último la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo – Militia Templi se incluye en la publicación “Estructura de la Iglesia de España” , página 342, donde actualmente existe una Preceptoría que integra a los Caballeros y novicios del Reino de España.

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